La bajada de las temperaturas y el uso de sistemas de calefacción para mantener un ambiente agradable en el interior de las casas aumenta considerablemente el consumo energético de los hogares. El radiador eléctrico es una de las opciones más habituales y utilizadas para calentarse, sobre todo porque no requiere de una instalación complicada, ni de obras o modificaciones considerables.
El incremento del consumo, junto a la subida del precio de la energía, ha hecho que aumente considerablemente el gasto de mantener encendido este electrodoméstico. Conocer qué radiador eléctrico consume menos, cuánto gastamos al encenderlo y otros trucos de ahorro energético pueden ayudar a reducir la factura de la luz de manera considerable.
¿Cuánto consume un radiador eléctrico?
Existen en el mercado distintos modelos de radiadores eléctricos, con tecnología y niveles de consumo también diferentes. Todos ellos cuentan con una potencia de energía determinada que viene indicada en su estructura o envoltura. Existen dos tipos básicos:
- Los radiadores eléctricos convencionales con potencias medias que oscilan entre los 2.000 y los 2.500 vatios.
- Los radiadores eléctricos de bajo consumo con potencias medias alrededor de los 600 vatios.
Para calcular cuánto consume un radiador eléctrico, es necesario multiplicar su potencia por el número de horas que está encendido y en funcionamiento. De este modo, si el radiador tiene una potencia de 2.000 vatios (W) y va a estar encendido durante 5 horas, el consumo de energía será de 10.000 vatios o 10 kilovatios (KW). Para pasar de vatios a kilovatios se debe dividir la cantidad de los primeros por 1.000.
Una vez realizado este cálculo, es posible calcular cuánto gasta un radiador eléctrico en dinero. Hay que multiplicar el número de kilovatios obtenido de la multiplicación anterior por el precio de kilovatios por hora Así, si el precio medio del kilovatio fuese 0,4 euros por hora, 10 KW equivaldrían a un gasto de 4 euros por esas 5 horas de uso, una cantidad que multiplicada por los días del mes resulta realmente elevada.
Consejos para reducir el consumo del radiador eléctrico
El incremento del precio de la energía, sobre todo con la llegada del invierno, hace indispensable buscar formas de reducir el consumo del radiador eléctrico y así ahorrar mientras se calienta el hogar y se tiene una vivienda más sostenible. Es una tarea sencilla si se siguen unos hábitos y consejos básicos.
Mantener las puertas y ventanas cerradas
Mantener condiciones idóneas de aislamiento contribuye a que el calor se mantenga por más tiempo dentro del hogar. El cerrar puertas y ventanas, sobre todo cuando se tiene encendido un radiador eléctrico, puede disminuir hasta en un 30% el consumo de energía necesaria para mantener la temperatura. Otras soluciones como colocar cristales aislantes o persianas eléctricas también ayudan, así como las alfombras y cortinas que tienen función aislante.
No forzar la producción de calor
Se debe mantener de manera homogénea una temperatura constante en el interior del hogar. 21 grados es el nivel perfecto para cualquier casa. Puede incrementarse, siempre sin excederse, de manera progresiva, dado que las subidas abruptas, sobre todo nada más encenderlo, aumentan el consumo del radiador eléctrico.
Programar las horas de encendido
Utilizar el termostato para programar su apagado o encendido, dependiendo de si estamos fuera o dentro de casa, contribuye a controlar cuánto gasta un radiador eléctrico. También es conveniente reducir el número de horas de encendido durante la noche.
Instalar radiadores de bajo consumo
¿Cuánto gasta un radiador eléctrico de bajo consumo? Considerablemente menos que un radiador eléctrico convencional, gracias al uso de fluidos interiores alternativos al agua como el aceite, que tiene una mayor inercia energética. Los radiadores de bajo consumo necesitan menos potencia para calentar las estancias. Por ello, instalar este tipo de radiadores supone un ahorro considerable de energía y una reducción del gasto al mismo tiempo.
Tener la potencia adecuada
Asegurarse de que la potencia contratada y la requerida por el calefactor eléctrico sean compatibles evitará que salte el diferencial y que aumente la factura energética de tu casa debido al apagado y encendido de los radiadores.
Contratar una tarifa de discriminación horaria
Contratar una tarifa noctura o de discriminación horaria permite un ahorro de hasta un 60% en el precio del kilovatio durante 14 horas al día. Las 10 horas restantes suelen llevar un recargo sobre el precio normal, pero que en conjunto siempre compensa.
Establecer temperaturas diferentes
No es necesario mantener la misma temperatura en toda la casa. Conviene disminuirla o programar el modo ECO en aquellas estancias que no se estén usando para reducir el consumo de los radiadores eléctricos.
No bloquear la circulación de calor
Deja libres los radiadores. Colocar ropa sobre un radiador para que se seque o poner un mueble demasiado cerca rompe la circulación del aire y con ello del calor, haciendo que los radiadores eléctricos consuman más potencia y trabajen más para alcanzar la temperatura deseada.
Con estos sencillos hábitos es posible ahorrar en el consumo del radiador eléctrico.