Cédula de habitabilidad: qué es, qué precio tiene y cómo se solicita

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5 febrero, 2024 · 8 mins de lectura

La Ley 18/2007 establece la obligatoriedad de contar con este documento para dar de alta servicios básicos, así como para vender o alquilar un inmueble

Pensar en un hogar es imaginar ciertos mínimos en lo que a salubridad, superficie o seguridad se refiere. Las propias administraciones exigen estos mínimos para poder ratificar lo que se conoce como cédula de habitabilidad, que no es otra cosa que un documento administrativo que avala el cumplimiento de ciertos requisitos básicos para que una vivienda pueda ser habitada.

Qué es la cédula de habitabilidad

Toda cédula de habitabilidad aborda cuestiones como la superficie útil mínima de la vivienda y las distintas habitaciones, así como la altura libre, huecos y equipamientos tales como sanitarios, cocina, agua caliente… Por lo general no suelen ser requisitos demasiado exigentes por lo que la mayoría de las viviendas cumplen los mínimos para obtener su certificado de habitabilidad. Además, la cédula de habitabilidad no tiene precio fijo, sino que depende de varios factores como veremos posteriormente.

Cédula de habitabilidad: ¿qué es?

¿La cédula de habitabilidad qué es exactamente? Se trata, como hemos visto, del documento que avala que una vivienda reúne las condiciones mínimas de salubridad, higiene y seguridad. Pero tener claro qué es la cédula de habitabilidad no sólo es importante para tener la certeza de que podemos vivir en esa casa. El documento también es necesario para otras cuestiones tales como dar de alta servicios básicos como la luz, el agua o el gas. Además, ​​el certificado de habitabilidad también será necesario para poder vender o alquilar un inmueble.

Los modelos, eso sí, pueden variar según las comunidades autónomas. Pero con independencia de si solicitamos la cédula de habitabilidad en Córdoba o en Pontevedra, por ejemplo, todos han de incluir como información básica:

  • Dirección y ubicación de la vivienda.
  • Superficie útil.
  • Habitaciones y espacios que conforman el inmueble.
  • Umbral máximo de ocupación.
  • Identificación del profesional habilitado y responsable de la certificación.

Una duda recurrente es si resulta o no obligatorio contar siempre con certificado de habitabilidad. La respuesta la encontramos en la Ley 18/2007 en virtud de la cual este documento es exigible siempre que vayamos a dar de alta servicios básicos, o en caso de que el inmueble sea objeto de una operación de compraventa o alquiler. En ciertos casos, eso sí, es posible realizar algunos de estos trámites contando únicamente con una licencia de primera ocupación.

La cédula de habitabilidad está regulada por las comunidades autónomas. Sin embargo, algunas han derogado total o parcialmente su tramitación (como Aragón o Castilla La Mancha) o, sencillamente, le han otorgado otra denominación. Con todo, tanto en aquellas comunidades autónomas donde no se requiere cédula de habitabilidad como en las que sigue estando vigente, también se exige licencia de primera ocupación o segunda ocupación que, en la práctica son documentos similares a la propia cédula de habitabilidad.

Certificado de habitabilidad

Si bien es cierto que unos u otros documentos son necesarios para operaciones de compraventa, hay excepciones. Cuando el objetivo final de la compra sea reformar o derribar la vivienda, cuando el uso del inmueble vaya a ser distinto al de vivienda o, sencillamente, si la tramitación va a realizarse posteriormente por una causa justificada, será posible no entregar la cédula de habitabilidad en el momento de la operación. 

Por otro lado, en el caso de que se pretenda vender o alquilar la propiedad, el certificado energético y la cédula de habitabilidad son documentos esenciales en el ámbito inmobiliario. El primero, permite conocer el consumo energético y promover la eficiencia y, el segundo, como ya hemos visto, garantiza las condiciones adecuadas de habitabilidad. Recuerda solicitar tanto el certificado energético como la cédula de habitabilidad si es necesario.

Tampoco es obligatoria a la hora de pedir una hipoteca, aunque si la vivienda en cuestión no dispone de este aval, lo más probable es que la concesión de la misma se complique. De hecho, si no existe cédula de habitabilidad, la entidad puede no considerar el inmueble como una vivienda y, en consecuencia, ofrecer un préstamo por otro tipo de concepto que, por lo general será menor.

¿Es posible empadronarse sin cédula de habitabilidad?

En muchos lugares, el proceso de empadronamiento puede variar según la jurisdicción específica. Pero, ¿es posible empadronarse sin cédula habitabilidad? Según la ley en la mayoría de los lugares, la cédula de habitabilidad sí es un requisito para empadronarse. Este documento certifica que una vivienda cumple con las condiciones mínimas para ser habitada de manera segura y adecuada.

Cómo pedir una cédula habitabilidad

El procedimiento para pedir la cédula de habitabilidad es sencillo. Basta con solicitar el documento a un profesional cualificado para emitirlo y presentarlo en la administración correspondiente. No obstante, es interesante saber que, en función de la antigüedad podemos distinguir entre:

  • Cédula de primera ocupación. Para viviendas de nueva construcción (dejan de estar vigentes a los 25 años).
  • Cédula de segunda ocupación. Es la renovación de la anterior por lo que se expide para viviendas que ya existen cuya cédula de habitabilidad ya no está vigente (caducan a los 15 años).
  • Cédula de primera ocupación de rehabilitación. Se solicita en aquellas viviendas que han sido sometidas a proyectos de rehabilitación.

A la hora de pedir la cédula de habitabilidad, asegúrate de solicitar la que corresponde con tu caso particular. 

Cómo renovar cédula de habitabilidad

Renovar la cédula de habitabilidad es un proceso importante para asegurar que tu vivienda cumple con las normativas requeridas. Aquí te presento los pasos clave que debes seguir si tienes la cédula de habitabilidad caducada:

  • Documentación. Reúne la escritura de la propiedad y otros documentos legales relacionados. Asegúrate de tener el certificado energético en regla.
  • Inspección técnica. Contrata a un técnico competente para llevar a cabo la inspección. Verifica que la propiedad cumple con los requisitos establecidos por la normativa local.
  • Preparación de documentos. Prepara un informe técnico detallado que respalde el estado de habitabilidad de la vivienda. Asegúrate de tener copias de todos los documentos necesarios.
  • Tramitación administrativa. Identifica el organismo competente en tu área para renovar la cédula de habitabilidad. Presenta la documentación y el informe técnico siguiendo los procedimientos establecidos. Paga las tasas y tarifas requeridas durante el proceso.
  • Revisión y aprobación. Permanece atento a los plazos de revisión establecidos por el organismo competente. Responde a cualquier solicitud adicional de información si es necesario.
  • Obtención de la cédula renovada. Una vez aprobada, la cédula de habitabilidad caducada ya está renovada. Recógela y verifica que toda la información en el documento sea correcta y esté actualizada.
  • Conserva la documentación. Guarda copias de la cédula renovada y los documentos relacionados en un lugar seguro. Ten la documentación disponible para futuras transacciones o inspecciones.

Evitar tener la cédula de habitabilidad caducada es esencial para garantizar la legalidad y seguridad de tu vivienda. Al seguir estos pasos y colaborar con profesionales, puedes asegurar que el proceso de renovar la cédula de habitabilidad se produce sin contratiempos y mantener tu propiedad en condiciones óptimas.

¿Cuánto cuesta una cédula de habitabilidad?

No hay una respuesta única a la cuestión de: “¿una cédula de habitabilidad que precio tiene?”. El precio final dependerá de los honorarios del profesional responsable de la misma pero también de las tasas de cada ayuntamiento que, en este caso, será el que a través de sus técnicos municipales ratifique el documento.

Para los residentes de Madrid, la cédula de habitabilidad no tiene costo. En Barcelona para la primera ocupación de una vivienda, el precio está alrededor de 42,60€. Las estimaciones generales del precio son de 65 a 112€ en el caso de un piso, si se trata de una vivienda unifamiliar el coste asciende de 75€ a 160€. Por último, un local comercial se sitúa entorno a los 300€.

Cuánto cuesta una cédula de habitabilidad

Lo normal es que la tramitación no lleve más de un mes, aunque en ocasiones, se admite como válido para ciertas gestiones la presentación de un justificante sellado en el que se indique que ha sido solicitada la cédula de habitabilidad. Siempre que esté vigente no será necesario tramitarlo y en caso de necesitar un duplicado, bastará con solicitarlo en la administración correspondiente.

Ahora que ya sabes qué es la cédula de habitabilidad, qué precio tiene y cómo solicitarla, puedes realizar este proceso rápida y fácilmente para comenzar o seguir viviendo en tu hogar. Además, recuerda que empadronarse sin cédula habitabilidad no suele ser posible, por lo que si necesitas dicho certificado será importante que tengas en cuenta cómo realizar estos trámites.