Agua caliente sanitaria solar: ¿Qué es y cuáles son sus ventajas?

Si estás buscando un estilo de vida sostenible, empieza desde el hogar. Una de las maneras de cuidar el planeta es a través del agua caliente sanitaria solar. El agua caliente sanitaria, producida con la energía del sol es ya toda una realidad. En este artículo te revelamos qué es, cuáles son sus ventajas y cómo puedes iniciarte en este método de autoconsumo.

¿Qué es el agua caliente sanitaria solar?

El agua caliente sanitaria que se produce con la energía solar se trata de una alternativa muy rentable y sostenible. Sólo necesitas una sencilla instalación para poder conseguir el 100% del consumo de agua caliente sanitaria de una vivienda. ¡Incluso en invierno! De esta manera no sólo ahorrarás energía, sino también dinero. 

Todas las viviendas disponen de un sistema para producir agua caliente sanitaria (ACS). Tradicionalmente se hace a través de una caldera que funciona con electricidad o con gas y que, como puedes advertir, supone un gran consumo energético que resiente tus facturas y recibos de luz y gas.

Como bien sabes, nos encontramos en un momento crucial en el que el precio del gas y la energía eléctrica suben de forma constante. Esto hace que muchas familias y hogares tengan que limitar el uso del agua caliente sanitaria muchas veces. Por otra parte, como planeta, atravesamos un período crucial para restaurar o intentar devolverle a la Tierra el daño que se le ha hecho. El cambio climático puede reducirse y moderarse a través de diferentes estrategias. ¿Y si te dijéramos que puedes obtener agua caliente sanitaria sin necesidad de consumir electricidad o gas? Además, estarías contribuyendo a cuidar el planeta. 

Pues esto es posible gracias al sistema de agua caliente sanitaria que funciona a través de la energía del sol. Recordemos que España es un país que, por su estratégica ubicación, dispone de un gran número de horas de sol. Así que, es una excelente alternativa para las familias que quieren ahorrar y apuntarse a la sostenibilidad. 

¿Cuáles son las ventajas de usar agua caliente sanitaria generada por energía solar?

Lo primero que tienes que saber es que la energía térmica o solar es increíblemente eficaz para poder calentar agua en casa a temperaturas óptimas.

Algunas de las ventajas de instalar un sistema que caliente el agua utilizando la energía solar son:

• Subvenciones y ayudas. Si te preocupa el precio de instalar agua caliente sanitaria solar, no te preocupes. Hoy en día existen distintos programas de ayudas y subvenciones para que la instalación no te suponga un gran desembolso. Sin embargo, ten en cuenta que la inversión a largo plazo supone un ahorro. 
• Ahorra hasta el 95% de energía para poder producir agua caliente a lo largo del año. ¿Alguna vez has mirado en tu factura cuánto gastas en calentar agua? 
• Ahorrar energía para producir agua caliente sanitaria supone la disminución de gastos en tu factura de luz y gas. 
• El agua caliente sanitaria solar es ecológica, no contamina el ambiente y no emite dióxido de carbono. 
• Supone un menor consumo de combustible fósil. Gracias a esto, en caso de haber problemas de suministro de gas y/o electricidad, ¡no te quedarías sin agua caliente!
• Tiene una larga vida útil, pues los sistemas pueden durar hasta 25 años desde su puesta en marcha. 
• Es un sistema automático, por lo que no tendrás que preocuparte por aquello de encender y apagar el “calentador” de agua. Y claro, no tienes que estar al pendiente de las horas en las que te resulte más barato hacerlo. 

¿Qué otras formas sostenibles de obtener agua caliente sanitaria existen?

Te sorprenderá saber que no sólo puedes tirar de la energía solar para calentar agua. Y es que existe otro método que puede ser de gran ayuda y que puedes instalar fácilmente en tu hogar. Se trata del agua caliente sanitaria por aerotermia o por bomba de calor. La bomba de calor es un sistema que permite aprovechar la energía del ambiente para calentar el agua que un hogar necesita. 

La aerotermia es un método que aprovecha el calor presente en el aire. A través de un sistema térmico, es posible conseguir cantidades importantes de energía térmica y que supone un gasto eléctrico minúsculo. Al igual que el agua obtenida con la energía solar, la aerotermia es un método eficaz, altamente eficiente y sostenible.

¿Cómo instalar agua caliente sanitaria en el hogar?

Antes de contarte cómo instalar agua caliente sanitaria en casa es importante que sepas cómo es el funcionamiento del sistema para que puedas elegir el que mejor se adapte a las necesidades de tu hogar. Lo primero que tienes que saber es que para poder obtener agua caliente sanitaria utilizando la energía solar, es necesario realizar la instalación de placas solares o fotovoltaicas. 

Estas placas son las encargadas de captar la radiación lumínica producida por el sol. El calor se transmite a un fluido que, gracias a la acción de un intercambiador, calienta el agua en un depósito acumulador. De esta forma, el agua caliente se almacena para que puedas utilizarla cuando sea necesario. 

La instalación del agua caliente sanitaria requiere de sistemas hidráulicos, de regulación, de control y uno de energía auxiliar. Con esta información en mente, podrás saber qué tipo de sistema de ACS necesita tu hogar. 

Agua caliente sanitaria por termosifón

Se trata del método más conocido y utilizado. Es bastante asequible y de fácil montaje y consiste en la instalación de placas solares en los tejados de las viviendas. En este sistema, el movimiento del fluido pasa por un circuito primario utilizando el principio de convección natural. 

El único inconveniente de este sistema es que la fuerza que impulsa el movimiento es pequeña y es necesario realizar un montaje y diseño de la instalación muy preciso para que el movimiento del fluido sea natural y constante. En estos sistemas, el depósito donde el ACS se acumula debe colocarse siempre en alto, por encima de las placas solares. 

Sistema por circulación forzada

Este es un sistema más eficiente que el de termosifón, pero su precio es más elevado. En este sistema, el movimiento del fluido se hace utilizando una bomba circuladora que puede establecer el caudal determinado de agua y acorde a las necesidades térmicas del hogar. Como este sistema emplea una bomba, no es necesario instalar el acumulador por encima de las placas solares ni en el tejado de las viviendas. 

Una de las grandes ventajas de este sistema es que pueden instalarse acumuladores de hasta 500-750 Kg (mayor capacidad que el termosifón) y en el interior de los edificios, a nivel del suelo.