Los loft están de moda. Este tipo de viviendas, de marcado carácter industrial, se han convertido con sus espacios diáfanos, sus techos altos y grandes ventanales en una opción habitacional lujosa y deseada por muchos. La continuidad visual y la amplitud son su seña de identidad pero, precisamente por eso, es importante optar por ideas de decoración que respeten la unidad del conjunto y que aporten personalidad y comodidad.
Ideas para decorar un loft
La estructura del loft y los elementos mobiliarios y decorativos que se seleccionen van a marcar el carácter de la vivienda. Un loft es como un gran lienzo en blanco esperando una mente creativa que lo llene de ideas.
Divide los espacios, pero poco
No conviene construir tabiques, salvo en las zonas donde la privacidad sea una necesidad ineludible, como los baños, para que el loft no pierda su esencia. Para crear divisiones que separen los espacios de trabajo, ocio y descanso, pueden usarse muebles largos o diferentes tipos de revestimientos en el suelo. Esto creará diferencias visuales sin romper la unidad del espacio. Si se quiere separar físicamente una zona, lo mejor es optar por paredes de cristal, especialmente las de tipo industrial con marcos metálicos.
Revestimiento de las paredes y suelos
Un aspecto esencial de cualquier vivienda, pero mucho más de un loft, es el revestimiento de paredes y suelos. Entre las ideas para decorar un loft, los materiales y revestimientos industriales son una opción que nunca falla por la versatilidad y modernidad que aportan al espacio y porque pueden ayudar a integrar y dar uniformidad al conjunto. Dejar vistos materiales de obras como muros de ladrillo, cemento o piedra y cubrir los suelos con microcemento u otros materiales industriales es ideal. No es necesario cubrir todas las paredes del mismo tono o del mismo material, la combinación es la clave. Otra posibilidad, también muy adecuada, es incorporar madera en los suelos. Dará un aspecto cálido a todo el conjunto y al mismo tiempo servirá de contraste respecto a la decoración industrial.
El esqueleto del edificio es bello
Los techos altísimos y los conductos del aire o de la electricidad a la vista son parte de la decoración de un loft. Las grandes canaletas o los tubos metálicos con acabados diferentes ayudarán a mantener, en combinación con otros detalles, el look industrial tan apreciado en estos espacios. Es mejor no disimularlos ni cubrirlos con falsos techos que empequeñezcan el ambiente. Mucho mejor pensar en acabados que los revaloricen, como el acero brillante o el negro intenso. Lo mismo sucede con vigas, columnas o pilares, especialmente si son de tipo industrial y de metal. Son un elemento ideal para integrarlos.
Luminosidad
Los grandes ventanales que caracterizan este tipo de viviendas son esenciales para aportar luminosidad. Además, son un elemento decorativo por sí mismos. Es tendencia prescindir de las cortinas y dejar las ventanas vistas.
Además, seleccionar una iluminación artificial adecuada es también fundamental, dado que sirve para crear ambientes y delimitar las diferentes zonas. Conviene mezclar lámparas de pie con otras de techo que permitan regular la intensidad de la luz. La imaginación es aquí el límite, desde focos de set cinematográficos hasta cualquier elemento que pueda convertirse en una lámpara. Lo oversize en el techo es un must para dar un aspecto industrial y contemporáneo a la decoración del loft.
Muebles con historia
Optar por muebles con una historia previa y de procedencia dispar es una forma sencilla de dar a la decoración del loft un aire personal. Combinar diferentes tipos de muebles aportará una eclecticidad distintiva al espacio. Por ejemplo, sillas procedentes de una cafetería, gabinetes antiguos de un consultorio médico o butacas de un cine pueden ser algunas de las opciones. También se pueden construir muebles que reutilicen elementos, como una mesa de comedor realizada a partir de una puerta antigua.
Objetos decorativos con personalidad
Utilizar elementos decorativos originales es una de las mejores ideas para decorar un loft. Mezclar lo viejo con lo nuevo es la clave: objetos artísticos como cuadros o carteles publicitarios de gran tamaño con elementos industriales y objetos antiguos que pueden encontrarse en anticuarios y mercadillos aportan un toque único. También aquí se puede jugar combinando estilos, como por ejemplo vinculando una nevera portátil de los años 50 con una silla Luis XVI que se haya heredado y que se puede tapizar con una tela vistosa y contemporánea. Si el loft es de un tamaño mediano o pequeño, lo mejor es optar por espejos que reflejen la luz y den mayor amplitud.
Construir un altillo
Los espacios multifuncionales son parte esencial de la experiencia de vivir en un loft pero, ocasionalmente en aquellos construidos en edificios industriales con techos altísimos, puede considerarse construir un altillo en alguno de los extremos. Es una gran idea para crear juegos de volúmenes y alturas que aportarán complejidad y romperán la unidad visual del loft. Es, además, una forma de conseguir espacio extra y mayor privacidad para colocar dormitorios o zonas de trabajo.
Artículos relacionados
